Este es el tercer y último artículo de una serie de tres partes sobre autismo y tecnología. Nuestro enfoque aquí es destacar un área muy controvertida que tiene el potencial de afectar la vida de millones en todo el mundo. Es decir, la creación de empleo y, en última instancia, los robots reemplazarán a los trabajadores humanos en el mercado de trabajo del futuro. ¿Qué papel jugarán los robots en el futuro escenario del empleo y, lo que es más importante, cuán seguro es su estado laboral? Estas son las preguntas que abordaremos en el contexto de este tema emocionalmente cargado.
Parte III
El objetivo de esta serie ha sido crear conciencia sobre la tecnología robótica y la velocidad de desarrollo dentro del campo. Nuestra tendencia es ver la nueva tecnología como paralaje, pero en realidad estamos más cerca de vivir en una realidad de alta tecnología de lo que pensamos. ¿Qué significa todo esto y cómo se verá el nuevo mundo del trabajo con los robots como parte integral del paisaje? Para algunos, el problema llega más cerca de casa ya que contemplan si su trabajo será eliminado debido a la tecnología. La respuesta más breve y precisa a esa pregunta es simplemente, tal vez.
Primero, es importante enfatizar el hecho de que no habrá una insurrección masiva por parte de los robots, como se ve en las películas. Eso no se basa en realidad principalmente porque la tecnología está realmente en su etapa incipiente. Tras un examen más detenido, lo más probable es que veamos una mezcla de humanos trabajando junto a los robots. Obviamente, estamos experimentando esta tendencia en la actualidad en la industria automotriz, la industria manufacturera y, en algunos casos, la hostelería. Es probable que el uso de robots se expanda a la atención médica y segmentos de los campos de servicio de alimentos. En la mayoría de los casos, los robots son a menudo la solución que implica ofertas de trabajo difíciles de llenar. Esto parece ocurrir en industrias que requieren habilidades digitales especializadas o áreas que requieren tareas repetitivas de ritmo rápido. Otro factor clave que influye en el uso de robots en la industria es simplemente una cuestión de economía. Algunos departamentos o áreas de producción son más eficientes para operar y los robots realizan tareas una vez asignadas a humanos.
El trabajador del siglo XXI debe estar preparado para actualizar constantemente las habilidades a fin de seguir siendo atractivo para los empleadores. Las empresas buscan personas que posean habilidades digitales y tengan la capacidad de ver el panorama general. Algunos analistas predicen que el desarrollo de nuevas habilidades será esencial para el crecimiento profesional continuo a fin de mantenerse al día con los avances en tecnología. Esto no significa volver a la universidad para otro título, sino adaptar una nueva habilidad o participar en un seminario de un día relacionado con un tema específico en un campo elegido. Para los empleados autistas, los robots pueden desempeñar un papel complementario ofreciendo asistencia en comunicación y conciencia social. El énfasis, sin embargo, está en la colaboración entre humanos y máquinas como un medio para maximizar la productividad. Tristemente, hay un elemento humano que contribuye a una mayor dependencia de la producción robótica que no se puede ignorar. Ese es el uso de drogas, particularmente la adicción a los opiáceos, y la devastación que crea en el resultado final corporativo. Debido al impacto negativo de las drogas en el lugar de trabajo, algunos empleadores han optado por automatizar.
La mejor estrategia para el empleo presente y futuro es agudizar las habilidades y diversificar los talentos para evitar ser el proverbial "pony de un truco". Un área necesitada de talentos sobresalientes involucra trabajos que requieren la disminución de habilidades blandas que las empresas aman. El empleado ideal tiene la rara combinación de excelentes habilidades técnicas y personas impecables o habilidades sociales. Las corporaciones globales están anhelando habilidades sociales y están trayendo consultores para enseñar a los empleados los matices de las comunicaciones, el profesionalismo y los puntos más finos de las interacciones humanas. Es importante destacar que estos son ejemplos de perfeccionamiento del toque humano, en lugar de centrarse exclusivamente en los robots. En conclusión, los robots tendrán un lugar designado en oficinas y hogares en el futuro, pero solo nosotros tenemos la capacidad innata de ser únicamente humanos.
Autor: George David Williams
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